domingo, 21 de septiembre de 2008

Cuidad

Calles ordenadas, nubes grisáceas, te mojarás.
Edificios viejos, somos intrusos, con nuestros motores de humo.
Rimas malas, muy malas, es la ropa, hoy no combinas.
¿Qué hubieran dicho nuestros tataratatarabuelos (al infinito)?¿Qué hemos hecho?
¿La historia realmente valiosa donde está?
Son fachadas de un México pintado en libros de historia,
y la mano de obra de todos los pintados en los grandes murales.
Nacionalismo...extraña palabra.
Nos imaginamos andando a caballo,
y la gente de repente carga con bastones y abanicos.
Las mujeres llevan largos vestidos pomposos y bellos escotes.
Los hombres platican en los cafés, vestidos de negro, son intelectuales.
Una gran mano nos borra del cuadro...
pantalones de tubo, playera fosforescente, tenis asquerosos y del pelo ni hablar.
¿Presente, o pasado? Tú los "VES", en el ayer y ellos no a tí...
Ahora hablas con otro, te VE, pero no puedes verlos a ellos.
VER otra curiosa palabra...además de todo verbo y me remite al ojo, su color, la mirada.

sábado, 20 de septiembre de 2008

¿Titulo?

Todo esta vacío, los trenes van sin rumbo entre túneles oscuros con unos cuantos pasajeros que cantan y no notan nada (notan nada). Y vienen a la memoria imágenes de sucesos históricos, de la época del blanco y negro, del patriotismo y uno en el tren, en tierra de nadie.
La luz es verde, pasa por el ojo, dice adelante, sal de allí vas rumbo al matadero. Vas que saltas, no hay relación entre las imágenes de tu mente y lo que haces, los pasos no se siguen, se tropiezan.
¿Donde? Bajo el árbol naturalmente, ahora eres maravillosamente pequeño. Pensamos en el tren y se hace pequeño, nos sentamos en el árbol y somos una hormiga. Va que va el insecto (nosotros) casi ¿corriendo? cargando un pétalo roto, rojo, pasión.
En la entrada del hormiguero, (¿Hogar-trabajo?), te comunicas (sin saber cómo) con todos y todos te entienden, nada de explicaciones, por primera vez fuiste lo suficientemente claro y no se quedó nada por decir.
Tristeza, no más secretos, ya no cargas el pétalo se lo comió una hormiga obesa que no da gracias, mala costumbre humana, los modales, las expectativas, sales de allí, fin del árbol.
Mejor no salir del tren, que se calle la luz verde, el túnel es oscuro y tu cantas. No pasa nada.

Vidrio y cerámica

Dame eso, aquello que rota alrededor de tí, fragmentos de vidrio, que a cada vuelta cambian de posición y color.
No me lo tienes que dar todo, sino te caes, es tu fuente de equilibrio. Sólo un pedazo de vidrio que pueda meter en la maquinita exacta que marca mi tiempo.
¿Qué ambicioso no?Mi tiempo, no lo comparto, en realidad la maquinita es la única que tiene contacto directo con él. Sin embargo le da por atorarse, su cerámica se quiebra cuando la luna empieza a girar demaciado rápido. Por eso te pido un cacho de vidrio, un hilo que pueda meter entre las grietas y deje girar los engranes.
Ahora si no quieres, probablemente no sepas aún de que hablo, no te haz dado cuenta que no te mantienes de pie por la gravedad. La gravedad te puede poner de cabeza, el vidrio que gira es el único que mantiene tus ideas hacia el sol.
Cerámica y vidrio, fragilidad absoluta que nos mantiene, el tiempo, la gravedad, leyes, nosotras.
Si nosotras siempre aquí inmóviles, viéndonos sin saber que hacer.
Si es que hay algo que hacer.

lunes, 1 de septiembre de 2008

Media noche

Ponerse los zapatos y correr a media noche,
correr hasta no poder respirar,
y gritar antes de beber,
agua caliente...

Perros, los que esperan en las esquinas,
miedo, el que me deja esperando,
que ataquen, si, que ataquen.

Pasa, tiempo pasa,
no hay perros en mi pecho,
no hay agua en mi garganta,
vengan perros que ya no aguanto.

No aguanto la espera,
es culpa del miedo,
antes solo era sed y zapatos,
ahora ya no aguanto.

Es la media noche...
Con miedo y
sin zapatos.