Por primera vez dio su discurso la abeja. Pedía perdón a los niños, por hacerlos correr con una paleta de limón en la mano; también a las muchachas, por hacerlas parecer ridículas frente al novio y sobre todo pedía perdón por la mala miel que habían estado dando.
Se esperó una módica participación de los mosquitos, pero estos bien callados tomaban notas ásperas para sus periódicos de mal gusto.
Criticaron la dicción de la reina, su vestimenta (como si ella eligiera el diseño), la miel fue víctima de todo tipo de groserías y eso que los mosquitos se alimentan de nuestra suculenta sangre.
No escribieron nada sobre lo que dijo, se la pasaron zumbando e imposibilitando la correcta audición, me picaron al menos 3 o 4 en el cuello y no puedo dejar de rascarme.
Dicho esto, me parece necesario (obligatorio, eminente, etc.), tomar medidas drásticas con estos últimos, ya que, además de succionar nuestra sangre, transmitir enfermedades y provocarnos comezón, el mosquito no produce miel, ni buena, ni mala. Los mosquitos no tienen quién los salve, son egoístas e individualistas.
La abeja puede pedir los perdones que sean, para mí, no tiene que disculparse por nada. Si la miel ha estado saliendo mal es por culpa del aumento de precios en los alimentos. Las colmenas burguesas tienen con que abastecerse, pero son minoría.
Es casi inverosímil que hoy en día la extracción de polen siga dependiendo de las langostas, cuando la flor está en terreno apícola, y peor aún que sea de dominio público y que nadie haga nada.
Como siempre, aquél que paga sale bien parado, la burguesía sigue abasteciéndose y vendiendo a altos precios su mercancía, mientras que las comunidades marginales deben conformarse con flores de segunda clase, y competir con los primeros productos.
Si queremos volver a saborear un té con miel, sin que llore nuestro monedero, debemos: expulsar las langostas del negocio apícola, que nada tienen que hacer allí y segundo dejar de invitar a conferencias insectos como los mosquitos que nada aportan y todo distorsionan al momento de "informarnos".
P.D: Por cierto, se veía hermosa la reina.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Ja ja ja ja, ¿los mosquitos eran periodistas de "nota roja"?.... putumpts.
Yo opino que debería de haber más subsidios para la innovación tecnológica dentro de las comunidades marginales. Mientras el gobierno no haga nada, la disparidad económica seguirá creciendo. Pronto nos encontraremos en un verdadero conflicto entre la reina y las obreras ergo, no habrá miel para el té.
Y yo me enojo mucho cuando no hay miel para el té.
El problema es que la reina no leyo al honorable zangano Marx.
En otras noticias, Clodomira Livoria Trastupijes, corresponsal de esta cadena, recibió amenazas por parte de unos sanguinarios sujetos que, no contentos con amenazarla, la hicieron sangrar inmisericordemente.
La susodicha no expresó comentarios al respecto y levantó una averiguación previa contra los agresores, con domicilio en un charco de por-allá.
Respecto a la crisis económica, el Ministerio Abejil de la Vida y Así declaró que se exigirán más subsidios y menos impuestos, entre otras propuestas irrealizables y mal fundamentadas.
Para Noticias Iconoclastas, El Gerente.
Publicar un comentario